¿Pero para qué buscar ayuda si tengo la situación que tengo y eso no se puede cambiar?

Algunas situaciones son verdaderamente complicadas y no tenemos todo el control para poder provocar cambios; a veces tenemos más del que creemos y se trata más bien de encontrar el cómo y de dejar de poner el foco en lo que no tenemos control para ponerlo en lo que sí lo tenemos. Y en otras, por desgracia, hay verdaderamente poca probabilidad de cambio o no tenemos un control para actuar sobre aquello que nos está perturbando. A veces creemos que si no podemos hacer nada porque nuestra situación cambie, estamos abocados a seguir sintiéndonos así de mal, que no hay salida y que ¿para qué pedir ayuda? ¡Si la psicóloga tampoco tiene el poder para poder cambiar las circunstancias por las que estoy pasado! Encantada de darte luz al explicarte que te equivocas. Y que aunque ni tú ni yo tengamos el poder de cambiar esas circunstancias por las que estás pasando, puedes sentirte de otra manera con ellas. Podemos hacer un trabajo para que te perturben menos y para que tengas más herramientas para afrontarlas sabiendo gestionar mejor tus emociones y comportamientos. Lo que hay dentro de ti, al respecto de cómo reacciona a lo que pasa ahí fuera si puede cambiar y, no es tan difícil como crees.